177. Fue inevitable no reparar nuevamente en el monumento que en fase de lame duck el presidente García ha impuesto al litoral limeño. Los medios peruanos se encargaron de replicar anoche la presencia de su cortejo de lujosos vehículos (que no respetan el tráfico como prometió hace 5 años) en una zona donde abundan peruanas y peruanos que no gozan de la sobrealimentada opulencia de la que gozan él, el alcalde chorrillano que agradecía con sumisa persistencia y los purpurados que interesadamente le secundaron.
Lo que despierta mi denuesto, cada vez que observo a García inclinarse para besar un anillo cardenalicio o en este caso para inaugurar la edificación de un "imagen religiosa", es saber que -a más tardar desde su cercanía intelectual con Víctor Raúl Haya y desde su larga estadía como persona cultivada en Francia- el aún presidente conoce que ambas expresiones coreográficas no tienen nada que ver con DIOS único y verdadero Quien realmente enriquece nuestras vidas sino con un afán de apelar out of political expedience (por conveniencia política) a la ignorancia y temores de gente que por falta de real información no ha procesado una etapa de esclarecimiento.
Con esa actitud García solo demuestra ser un líder no del futuro que gracias a instrumentos como Google y Facebook nos acercará a todas y todos a la verdad sino del pasado en el cual se prefirió medrar con aquel oscurantismo que ya viene rescindiendo de la faz de la tierra, por voluntad divina.